FICHA TÉCNICA

Instalación sonora: Pedro Alcalde
Inauguración del proyecto Paraíso (IN)habitado
Comisionado por: ImaginaMadrid, Matadero Intermediae, Ayuntamiento de Madrid
Parque de juegos sonoros: Daniel Tornero, Ana Cristina Herreros, Malú Cayetano y Campo Adentro INLAND (Amelie Aranguren)
Lugar: Solar delante de la Biblioteca Pública Municipal Ana María Matute, Madrid
Fecha: 17 de noviembre 2018 (instalaciones abiertas durante los meses de noviembre y diciembre 2018)

ORIGEN DEL PROYECTO
En su célebre conferencia “Habitar, Construir, Pensar”, Heidegger observó que el rasgo esencial del ser humano radicaba en “el habitar”, y que ese habitar significaba al mismo tiempo “cuidar” y “cultivar”. Paraíso (IN)habitado es un proyecto diseñado para cuidar y cultivar un solar específico en el barrio de Carabanchel de Madrid mediante la escucha y la observación.
Una primera fase del proyecto realizó una compilación de la memoria oral de los vecinos del barrio y unos talleres sonoros para la escucha atenta de la ecología urbana: suelo, agua, flora y fauna. La colocación posterior de diferentes periscopios, escuchaderas, topófonos y altavoces efectuó una resignificación paisajística del solar ofreciendo nuevas formas de observar y escuchar el barrio y las voces de sus habitantes.
La instalación sonora se ideó para la inauguración del proyecto.

TÍTULO
Paraíso inhabitado es el título de una novela de Ana María Matute, escritora que da nombre a la biblioteca situada detrás del solar donde se realiza la intervención. El prefijo “in” privativo queda puesto entre paréntesis siguiendo la intención del proyecto de volver habitable lo que antes era baldío.

MÚSICA
La instalación sonora consiste en una composición electroacústica para cuatro canales con sus altavoces respectivos orientados hacia los cuatro puntos cardinales: Norte, Sur, Este y Oeste.
Notas tendidas producidas por un vibráfono tocado con arco de contrabajo seguidas por el sonido de un sónar (sonido cuya función original es la de esperar un eco) puntúan regularmente la duración de la composición. De ahí surgen, a modo ecos, los sonidos de los cuatro trombones, distribuidos alternativamente por los cuatro canales de la instalación. Sus encuentros y ramificaciones van progresivamente esculpiendo el espacio, habitando así, de ese modo, el solar y su entorno.
El material musical es acompañado a modo de contrapunto con los sonidos de las 34 especies de pájaros que habitan en las cercanías del lugar y las voces de los vecinos, niños y adultos, con sus relatos, recuerdos, emociones y deseos. Para las voces se utilizó el archivo sonoro consolidado por el proyecto como patrimonio oral del vecindario.
La instalación sonora no cuenta con principio ni final aparente, como si los sonidos, las voces y la música siempre estuviesen allí y nuestra escucha momentánea captase tan solo un momento del flujo sonoro que habita en el lugar.

PALETA SONORA
distribuida en cuatro canales
1- Notas de vibráfono con arco de contrabajo (sib4, mi5, do#6, fa4, si4, sol3, re4, la#5)
2- Sonido sónar
3- Cuatro trombones tenor (ecos)
4- Voces vecinos (niños)
6- Voces vecinos (adultos)
7- 34 especies de pájaros presentes en el solar

SOPORTE
ordenador

DURACIÓN
1 hora